19/9/13

de: La historia del ojo







Se desnuda. Deja su ropa por los arbustos y se dirige a los pasillos del manicomio, castillo fortificado, en busca de una virgen caída en la locura. Lo único que tiene encima de su existencia es un revólver. Por las habitaciones oscuras se asoma, con el golpeteo de sus pies desnudos sobre el cemento, asesino, violador, humano…







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